La presidenta Sheinbaum regularizará viviendas abandonadas y revendidas, son casi un millón de hogares del Fovissste e Infonavit.
La presidenta Sheinbaum anunció durante la reciente Mañanera un ambicioso plan para regularizar la situación de casi un millón de viviendas en todo el país. Esta iniciativa busca brindar certeza jurídica a miles de familias mexicanas.
De las 933 mil viviendas identificadas, una parte significativa enfrenta diversas problemáticas. Alrededor de 131 mil inmuebles están inmersos en complejos juicios masivos que impiden su correcta escrituración y habitabilidad.

Otro importante grupo, conformado por 216 mil viviendas, ya han sido adjudicadas, pero aún carecen de las escrituras correspondientes. Esta falta de documentación genera incertidumbre entre los propietarios.
Además, se detectaron 497 mil viviendas con créditos que presentan un alto grado de adeudo, lo que dificulta su regularización. Finalmente, 89 mil viviendas corresponden a créditos otorgados por el FOVISSSTE.
Para abordar esta compleja situación, se ha desplegado un extenso operativo de censo a nivel nacional. Un total de mil 632 servidores y servidoras de la nación se encuentran trabajando en 255 zonas y mil 62 municipios.
Este censo es coordinado por el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), el Fondo de Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (FOVISSSTE) y la Secretaría de Bienestar.
El objetivo primordial es regularizar las 933 mil viviendas identificadas. Hasta el 5 de mayo, los servidores de la nación han censado 47 mil 845 inmuebles, de los cuales el 87 por ciento están ocupados y el 13 por ciento desocupados.
La presidenta Sheinbaum explicó que el censo permitirá obtener información detallada sobre el estatus de cada vivienda. Se busca determinar si están habitadas por los acreditados originales o por terceros, y si existen demandas legales.
En los casos de familias en situación de vulnerabilidad que ocupan viviendas, se les ofrecerán opciones de renta o incluso la posibilidad de adquirir la propiedad. La prioridad es no desalojar a nadie.
“El objetivo es regularizar estas viviendas”, enfatizó Sheinbaum, reconociendo la existencia de viviendas precarias. Sin embargo, aseguró que no se dejará a nadie en esta situación irregular.

La mandataria fue enfática al señalar que esta iniciativa no se trata de desalojos. El gobierno está revisando cada caso para tomar decisiones que protejan el derecho a la vivienda de las personas.
En los casos donde la vivienda esté ocupada por alguien que no solicitó el crédito originalmente, se analizará la situación de esa familia. Si se trata de un hogar vulnerable, se le ofrecerán alternativas de vivienda.
A partir de los datos recabados en el censo, se implementarán diversas soluciones para la regularización. Para las viviendas ocupadas por los acreditados, se buscará reestructurar los créditos.
Esta reestructuración podría incluir el congelamiento de pagos, la reducción de la tasa de interés y de las mensualidades, e incluso quitas de saldo para facilitar la liquidación.
En el caso de viviendas ocupadas por terceros, se implementará un esquema de arrendamiento social con opción a compra. Esto permitirá a las familias acceder a una vivienda digna.
Finalmente, para las viviendas desocupadas y/o vandalizadas, se contempla su rehabilitación. Una vez acondicionadas, se ofrecerán bajo el esquema de arrendamiento social con opción a compra.
Este esfuerzo coordinado entre diversas instituciones del gobierno federal representa un paso significativo para garantizar el derecho a una vivienda digna para miles de familias mexicanas.