Encarcelan a presidente del PRI por fraude millonario en Yucatán; se trata de uno más en la larga lista de priístas delincuentes.
Rafael Alejandro Echazarreta Torres, presidente del PRI en Mérida, se detuvo por presunto fraude superior a 12 millones de pesos, según confirmó la SSP de Yucatán.
La captura se ejecutó por agentes de la Policía Estatal de Investigación (PEI) en coordinación con la Fiscalía General del Estado, cumpliendo una orden judicial vigente.
El empresario Horacio de Freitas denunció a Echazarreta por solicitar inversiones a cambio de acciones en la empresa Exportaciones Integrales Mexicanas.
De acuerdo con la querella, el político prometió el 40% de participación accionaria, pero nunca entregó utilidades ni devolvió el dinero invertido.
Los hechos ocurrieron entre 2023 y 2024, y la denuncia formal se presentó el 30 de diciembre de 2024 ante la FGE.
La carpeta de investigación está registrada como NORTE-57-24-2024, y el proceso judicial sigue en curso mientras el acusado permanece bajo custodia.
Echazarreta, de 46 años y originario de Ciudad de México, asumió la presidencia del PRI en Mérida en noviembre de 2024 tras abandonar Morena.
Durante su gestión, recibió a la presidenta Claudia Sheinbaum en la FAMEX 2025, lo que generó controversia dentro del ámbito político local.
El PRI estatal, encabezado por Gaspar Quintal Parra, calificó la detención como una “persecución política” y exigió respeto al debido proceso.
En un comunicado, el partido acusó al gobierno estatal de usar el sistema judicial para silenciar voces críticas y opositoras.
Echazarreta había manifestado su intención de competir por la alcaldía de Mérida en las elecciones de 2027, lo que aumentó el perfil del caso.
La SSP reiteró su compromiso de actuar conforme a derecho y llamó a la ciudadanía a denunciar cualquier acto ilícito.
El caso ha generado reacciones divididas entre simpatizantes del PRI y defensores del gobierno estatal, polarizando el ambiente político en Yucatán.
La detención de Echazarreta podría tener implicaciones en la estrategia electoral del PRI rumbo a los comicios municipales.
Las autoridades aseguran que el proceso será transparente, mientras el PRI insiste en que se trata de una represalia política encubierta.