Si los vehículos eléctricos no acaban de convencerte, por el precio o la autonomía, pero tampoco te inclinas por una bicicleta, por la razón que sea, ¿qué tal un Elf? Esta bicicleta eléctrica solar, una especie de híbrido que funciona a pedales, pero también con un motor eléctrico que puede recargarse con energía solar, está expandiéndose a lo largo y ancho de Estados Unidos.
Elf. Bicicleta eléctrica solar.
“Quema calorías, no aceite”, es uno de los reclamos de esta bicicleta eléctrica solar al que se añadiría: quémalas, pero si ves que has tenido suficiente deporte, tira de motor eléctrico. Porque Elf puede ser utilizado como cualquier bicicleta del mundo pero, cuando uno dice basta, los pedales ceden terreno ante un motor de 600 vatios y baterías de ión de litio (en el modelo estándar, una de 48V) con autonomía para circular casi 29 kilómetros sin pedales y cerca de 50 pedaleando.
Con un panel solar de 100 W incorporado al techo, puesto que el Elf, como se puede ver en las imágenes, va recubierto cual vehículo, la batería puede cargarse por esta vía, para lo que necesitará un mínimo de 8 horas en condiciones óptimas de sol. Si se opta por el cargador, la batería estará completa en entre dos horas y media y cuatro.
Respecto al consumo de energía por distancia recorrida, los impulsores de este vehículo, la compañía estadounidense Organic Transit, asegura que Elf puede recorrer unos 53 kilómetros por kWh, lo que hace de él una opción “muy ligera y eficiente” que, además, puede alcanzar una velocidad de 48 kilómetros hora.
La propuesta, con la que sus creadores aseguran haber lanzado al mercado el “vehículo más eficiente del planeta”, ha tenido tanta aceptación que se está popularizando en América del Norte, además de haber recibido pedidos de Australia, Alemania, Holanda o las islas Fiji, mercados en los que la empresa oferta un modelo individual de 72 kilos de peso, otro de dos plazas, y un tercero para uso profesional, por ejemplo en labores de vigilancia, gestión de eventos o mantenimiento.