La industria del transporte aéreo es uno de los mayores contribuyentes al problema del calentamiento global, emitiendo casi mil millones de toneladas de CO2 al año.
Eso está provocando un creciente interés en un modelo diferente conocido como “economía circular“. En lugar de simplemente desechar nuestros residuos, encontramos formas de reutilizarlos o reciclarlos en algo más útil.
Los aviones no sólo emiten enormes cantidades de CO2, sino también otros gases de efecto invernadero como el óxido de nitrógeno directamente a la atmósfera, donde su efecto de calentamiento aumenta enormemente.
Los combustibles fósiles que queman para crear todas estas emisiones son hidrocarburos, lo que significa que están compuestos por una combinación de carbono e hidrógeno. Esto ha llevado a algunos a sugerir que sería posible crear versiones sintéticas de estos combustibles capturando el CO2 que los aviones producen y combinándolo con el hidrógeno extraído con agua.
Investigadores de la Universidad de Oxford han desarrollado un nuevo catalizador de bajo coste que puede convertir directamente el CO2 en combustible para aviones, que según ellos podría eventualmente sentar las bases para una economía circular para el combustible de aviación.
Al combinar los hallazgos de investigaciones anteriores, el grupo fue capaz de crear un catalizador de bajo coste basado en hierro que podría producir rendimientos sustanciales de combustible para aviones a partir de CO2 e hidrógeno. El hierro ya se usa comúnmente en este tipo de reacciones, pero lo combinaron con el manganeso, que se ha demostrado que aumenta la actividad de los catalizadores de hierro, y el potasio, que se sabe que fomenta la formación de hidrocarburos de cadena más larga.