La NASA descubrió hace 10 años que los revestimientos blancos en los tejados de la ciudad de Nueva York podrían reducir sus temperaturas máximas en una media de 24 °C.
También han comprobado cómo los científicos diseñan pinturas altamente reflectantes hechas de vidrio, y otras que incorporan teflón para reflejar hasta el 98% de la radiación solar.
Los científicos de la Universidad de Purdue presentaron una pintura ultrablanca capaz de reflejar el 95,5% de la luz solar. Este material ya supera a las pinturas reflectantes del calor disponibles en el mercado, que reflejan entre el 80 y el 90% de la luz solar.
Su nueva pintura ultrablanca debe su excelente rendimiento a una cuidadosa mezcla de partículas de sulfato de bario, un compuesto químico usado en el papel fotográfico blanco y los cosméticos.
La pintura se puso a prueba en exteriores, donde se comprobó que mantenía las superficies a 10,5 °C más frías que su entorno por la noche, y a 4,5 °C más frías bajo la luz solar intensa en pleno día.
En una prueba al aire libre, en pleno invierno y con una temperatura ambiente de 6,1 °C, la pintura redujo la temperatura de una superficie en 10 °C.